1. Introducción
Las democracias en Europa, Estados Unidos y América Latina han experimentado en el período reciente un importante avance de opciones de derecha radical. Estas agrupaciones han logrado apropiarse de demandas antiestablishment asociadas a la necesidad de seguridad y protección frente a diferentes tipos de crisis (migratorias y económicas, por ejemplo) que se volvieron más acuciantes con la pandemia de covid-19. En diferentes países la derecha radical se ha vuelto parte del mainstream político, logrando que sus posicionamientos frente a distintos temas y propuestas sean aceptados por otras fuerzas políticas (Mouffe, 2023).
En el Perú, la crisis de representación política y los efectos sociales y económicos de la pandemia generaron condiciones para la aparición de alternativas antiestablishment, incluidas alternativas de derecha radical. El presente trabajo explora el avance de la derecha radical en el Perú a través de la experiencia de Renovación Popular (2020-2024). Nos interesa comprender cómo el conservadurismo radical de Renovación Popular ha buscado construir su política de representación en el actual contexto de crisis política. Sostenemos que Renovación Popular busca construir su lazo representativo a través de un discurso orientado a polarizar el campo político, articulando una interpretación del neoliberalismo basada en el "éxito económico" con la figura de una autoridad tutelada por las fuerzas armadas y las iglesias evangélicas reconstruccionistas.
El trabajo está organizado en cuatro partes. La primera parte desarrolla nuestra definición del conservadurismo radical, entendida como una variante de la derecha radical. Nos interesa comprender este fenómeno político desde las singularidades latinoamericanas. A continuación, presentamos la metodología que orienta nuestro estudio, basada en el análisis del discurso político. Luego buscamos dar cuenta del proceso de radicalización implicado en la (re)fundación de Renovación Popular. La parte final profundiza en el discurso político de Renovación Popular a través de tres tópicos: el modelo económico, la memoria nacional sobre los años de la violencia política (1980-2000) y la defensa de la familia. Cerramos este trabajo con algunas conclusiones para seguir animando la reflexión sobre el conservadurismo radical en el Perú.
2. Una aproximación conceptual al conservadurismo radical
En los últimos años, desde la sociología y la ciencia política se han desarrollado diversos estudios sobre la denominada "derecha radical" (Stefanoni, 2021; Traverso, 2018; Zanotti y Roberts, 2021). Desde diferentes enfoques y énfasis, dichos estudios han coincidido en destacar que esta derecha con impronta personalista ha logrado capitalizar la indignación y los temores colectivos de importantes sectores de la sociedad frente a las crisis económicas y sociales que se experimentan a escala global, desarrollando discursos políticos reaccionarios y antiestablishment que en más de un sentido resultan ser un desafío para la democracia liberal.
El estudio de los investigadores Joan Antón e Ismael Seijo (2023) es un importante aporte para comprender a la derecha radical. A través de referentes de este espectro político, los autores analizan el ideal de sociedad a la que aspiran, los diagnósticos que realizan de sus contextos sociales y políticos, además de los medios que plantean para alcanzar sus objetivos. Para Antón y Seijo, la derecha radical forma parte del universo de la "ultraderecha", distinguiéndose en su interior de la "extrema derecha" fascista2. Lo que hermana a este universo político es su hostilidad hacia la democracia liberal. Las diferencias en su interior están ligadas a cuestiones ideológicas y a los medios que plantean para su quehacer político. Para los autores, hablar de la derecha radical es hablar de un conjunto heterogéneo de proyectos políticos que expresan sus diferencias en los aspectos referidos al nacionalismo, a la política económica y a los valores morales que defienden.
Una de las definiciones de la derecha radical más difundidas en la literatura de las ciencias sociales es la elaborada por Cas Mudde (2007), quien sostiene que en términos ideológicos esta derecha se caracteriza por su nativismo, autoritarismo y populismo. El nativismo estaría relacionado con el carácter nacionalista y xenófobo de la derecha radical, que se expresa en medidas tales como las restricciones a la migración. El autoritarismo de tales proyectos políticos implicaría no tanto la búsqueda de un cambio de régimen, sino el énfasis en el orden y la seguridad en el ejercicio del poder. Por último, el populismo concebido como una ideología delgada o maleable que divide a la sociedad en dos grupos opuestos y homogéneos (élite vs. pueblo) bajo criterios morales.
Antón y Seijo (2023) destacan que una de las principales fuentes de la derecha radical es el conservadurismo radicalizado. Las características que identifican nuestros autores en esta teoría política son de utilidad para nuestro estudio de caso. El conservadurismo radicalizado plantea un diagnóstico decadentista de la sociedad contemporánea apelando a la figura de agentes externos e internos que socaban la idea de "Nación" vital desde esta perspectiva para mantener un sentido de pertenencia, de apego a la comunidad y a la idea de "Familia" (heteronormativa, claro está), que es identificada como la encargada de la educación moral de sus integrantes. Los medios que esgrime el conservadurismo radicalizado para evitar la decadencia de "occidente" pasan por: i) poner freno al "intervencionismo estatal", limitando los derechos de la población a unos mínimos; ii) defender el libre mercado; y iii) fundar escuelas propias donde inculcar el pensamiento conservador. Veremos cómo estos aspectos, con algunos matices, se encuentran en nuestro caso de estudio.
El trabajo de Natascha Strobl (2022) es otro aporte importante para definir al conservadurismo radical. Según esta autora el conservadurismo radical mantiene del conservadurismo tradicional la apelación al afecto antirracional basado en una cosmovisión religiosa para generar procesos de identificación colectiva. Pero a su vez, el conservadurismo radical supone una novedad al cuestionar los consensos políticos mínimos que han fundamentado a las democracias liberales de la posguerra. Más que de programas detallados para lograr políticas más efectivas dentro de los márgenes planteados por el sistema democrático, lo que se buscaría es transmitir a la población una nueva sensación de seguridad. Para ello, el conservadurismo radical prioriza la producción de narrativas antagonistas y relecturas de la historia para exaltar determinados sentimientos. Tres aspectos que Strobl (2022, pp. 37-116) analiza en la lógica y la práctica política del conservadurismo radical nos resultan particularmente relevantes para nuestro estudio de caso:
I. La polarización nosotros/ellos: la definición de la frontera política que plantea el conservadurismo radical se basa en la magnificación de las diferencias existentes en la sociedad. Esta magnificación opera en torno a la narrativa de la "batalla cultural" que plantea una visión del mundo dicotómica y maniquea.
II. La reestructuración antidemocrática del Estado: a través de la ocupación de altos cargos en el Estado, el conservadurismo radical incide en instituciones claves del sistema democrático, tales como el Poder Judicial, el Parlamento o el propio Poder Ejecutivo. Esta incidencia suele ser explicada apelando a la figura de "élites corruptas" o "comunistas" enquistadas en el Estado que deben ser erradicadas.
III. La construcción de "realidades paralelas": el conservadurismo radical genera procesos de identificación colectiva a través de narrativas que no operan bajo criterios de verdad o mentira, negando la realidad compartida como base para cualquier entendimiento con sus adversarios devenidos en enemigos políticos3.
A partir de lo anterior, resulta importante enfatizar en que todo proceso de identificación implica una dimensión afectiva que impulsa el deseo. En el campo de la política esta dimensión afectiva se podría expresar en el deseo de la población por sentirse segura o alcanzar algún tipo de orden frente a situaciones de crisis. Los afectos son los que impulsarían a los sujetos a actuar en pro de una causa común, por lo que serían el "vehículo" de las ideas y los valores de un colectivo (Mouffe, 2023, pp. 49-65).
Las contribuciones hasta aquí presentadas son valiosas, pero no podemos dejar de reconocer que todo conocimiento es situado. Nos resulta necesario leer y discutir dichos aportes desde los procesos políticos latinoamericanos, pues los estudios citados en este apartado han desarrollado sus análisis al observar principalmente los procesos de radicalización de las derechas de Europa y Estados Unidos. Si bien es posible identificar las características de estas derechas en las experiencias latinoamericanas, es ineludible para fines analíticos reconocer determinadas singularidades de nuestra región en general y del Perú en particular.
En sintonía con lo arriba mencionado, Juan Carlos Ubilluz (2021) ha reconocido, por ejemplo, la capacidad heurística del concepto propuesto por Mudde para entender a la derecha radical, bajo el requerimiento de reconocer las singularidades latinoamericanas. Nuestro autor plantea estas singularidades en tres planos: en el económico, en el de los derechos civiles y en el histórico. En el plano económico, a diferencia de las experiencias de Europa y Estados Unidos, en donde la derecha radical plantea controles al libre mercado (el Brexit por ejemplo en Reino Unido), en nuestra región la derecha radical propone una profundización del libre mercado. En el plano de los derechos civiles, más que un discurso nativista antimigración, lo que encontramos en América Latina es una propuesta antigénero, señalando a la "ideología de género" como una de las responsables de la descomposición de la comunidad4. En el plano histórico, la matriz de la derecha radical latinoamericana no sería tanto el fascismo, sino la tradición oligárquica, colonial y racista. Para nuestro autor, la utopía reaccionaria de la derecha radical en América Latina nos remitiría "a una nación cristiana/conservadora y capitalista cuyo correlato histórico no es otro que la vieja oligarquía latinoamericana" (Ubilluz, 2021, p. 105), pero que, a su vez, aspira a una nación insertada plenamente al capitalismo global. En el Perú esto implicaría la articulación de los imaginarios sociales de la República Aristocrática y de la hegemonía neoliberal construida a partir de los años noventa del siglo XX.
Coincido con las observaciones que Juan Carlos Ubilluz realizan al concepto de "derecha radical" propuesto por Cass Mudde para identificar las singularidades latinoamericanas, pero agregaría una consideración en torno al factor populista. Si en particular estamos de acuerdo con Strobl en que una de las características del conservadurismo radical (una de las variantes de esta nueva derecha) es la polarización nosotros/ellos que perpetúa una lógica dicotómica y maniquea del campo político, esto se asemeja más a una lógica jacobina que a una lógica populista. El trabajo de Gerardo Aboy Carlés (2023) sobre el populismo latinoamericano ha dado cuenta del carácter regenerativo en la manera en que el populismo procesa las diferencias políticas. Más que fronteras infranqueables, como las que construye el conservadurismo radical, el populismo -si bien divide en dos el campo político- construye fronteras políticas porosas que habilitan las negociaciones, las inclusiones y exclusiones permanentes de los actores en su espacio político. En tal sentido, nos parece un error caracterizar al conservadurismo radical como un proyecto populista.
Para terminar este apartado, permítannos retomar la observación de Ubilluz sobre la tradición oligárquica, colonial y racista de las nuevas derechas latinoamericanas para acercarnos a ella desde otro ángulo, apelando al concepto de "orden tutelar" trabajado por Guillermo Nugent (2010). Para nuestro autor el orden tutelar supone una forma de ejercer la autoridad muy expandida en América Latina, en donde quienes custodian la patria y la moral que integra a la sociedad son las Fuerzas Armadas y la Iglesia, poseedoras de la última palabra en estos menesteres. Estas instituciones tutelares se presentan como los diques de contención ante las presuntas amenazas de descomposición de la comunidad nacional. La autoridad tutelar presupone el reconocimiento de una incapacidad intrínseca de los subordinados para valerse por sí mismos, planteando una integración jerárquica de la sociedad. La autoridad tutelar se expresa, por ejemplo, en los límites del carácter laico de las políticas públicas de los Estados latinoamericanos referidas a los derechos sexuales y reproductivos. Lo que nosotros identificamos es que la apelación a esta autoridad tutelar ha experimentado un cambio en las últimas décadas debido a una mayor presencia en las sociedades latinoamericanas de Iglesias evangélicas orientadas por teologías "reconstruccionistas". Retomaremos este último punto más adelante.
3. Breve nota metodológica del estudio
Para el desarrollo del presente estudio exploratorio hemos optado por un enfoque cualitativo de estudio de caso (Stake, 1994). El asunto seleccionado ha sido la organización política Renovación Popular, debido a que aún son escasos los estudios sociológicos que se han hecho sobre ella para comprender cómo se viene configurando el conservadurismo radical en el Perú. Los pocos estudios existentes se han enfocado en la figura del líder (Morocho, 2023; Roman, 2022; Vildoso, 2022). Sin desconocer la relevancia de estas aproximaciones, a nosotros nos interesa contribuir en los esfuerzos de comprender el conservadurismo radical en el Perú ahondando en su labor parlamentaria. Hemos priorizado esta unidad de análisis para entender este fenómeno en una mayor dimensión, más allá del líder.
Para nuestro estudio partimos de la revisión de proyectos de ley presentados al Congreso por el grupo parlamentario de Renovación Popular e intervenciones de sus integrantes en debates parlamentarios durante sesiones legislativas que abarcan el período de finales de 2021 hasta inicios de 2024. Esta revisión se ha enfocado en tres ejes temáticos: el modelo económico, la defensa de la familia y la memoria en torno a los años de violencia política (1980-2000) (véase anexo). Seleccionamos estos tres ejes temáticos asumiendo que son particularmente importantes en el discurso político de Renovación Popular. Hemos complementado nuestras fuentes con la revisión de columnas de opinión y videos que nos han ayudado a tener una mayor comprensión del discurso de la organización.
Nuestro estudio se basa en el análisis del discurso, ya que consideramos que este nos permite aproximarnos a la construcción de las identidades colectivas. Para ello hemos apelado a las contribuciones de la teoría de la enunciación de Eliseo Verón (1987) y la teoría del discurso de Ernesto Laclau (2006). Del trabajo de Verón hemos considerado el análisis de la configuración de dos dispositivos de enunciación en los discursos políticos: el prodestinatario (colectivo de identificación al que se apela sosteniendo que se comparten determinadas convicciones políticas) y los contradestinatarios (alteridad asumida como enemiga o adversario al considerar que cuestiona o amenaza las convicciones políticas del colectivo de identificación). De la teoría de Laclau hemos recuperado el concepto de "nodo discursivo", el cual refiere a la operación de determinados significantes que son capaces de estructurar un discurso condensando múltiples significados, lo cual permite articular las expectativas y demandas de diferentes actores sociales. Vale señalar que ambos autores coinciden en reconocer que el discurso político se diferencia de otros tipos de discurso por la centralidad que en su estructuración adquieren los antagonismos.
Además, nuestro análisis del discurso toma en cuenta las condiciones que inciden en su producción y reconocimiento. Las condiciones de producción están relacionadas con determinadas instituciones (políticas, económicas, culturales) que orientan la enunciación política. En nuestro caso de estudio, la enunciación política está condicionada por la institucionalidad del régimen político, del cual el Congreso forma parte. Las condiciones de reconocimiento tienen que ver con la capacidad de interpelación de un discurso, es decir, con la posibilidad de que sus destinatarios se identifiquen con sus planteamientos y acciones. En nuestro caso de estudio consideramos que esta capacidad de interpelación está relacionada con la apelación del conservadurismo radical a la figura de la autoridad tutelar5.
4. El proceso de radicalización: de Solidaridad Nacional a Renovación Popular
4.1. La experiencia de Solidaridad Nacional (1999-2020)6
Solidaridad Nacional fue una organización que apareció en la escena política peruana a finales de la década de 1990 en torno a la figura de su líder Luis Castañeda Lossio. En un primer momento, la organización fue forjada como un partido de cuadros de clase media por un grupo de profesionales con experiencia en la gestión pública. Inscrito como partido oficial desde 1999 la organización construyó un perfil más pragmático que ideológico basado en una lógica tecnocrática.
Solidaridad Nacional inició su participación en el terreno electoral en las elecciones generales del año 2000 oponiéndose al gobierno de Alberto Fujimori. Tras la caída del régimen autoritario de Fujimori y el adelanto de las elecciones generales para el año 2001, la organización se integró a la alianza de centro derecha Unidad Nacional. En 2002, la alianza postuló a Luis Castañeda Lossio a la alcaldía de Lima y ganaron el sillón metropolitano, iniciando una gestión que duró ocho años tras su reelección en 2006. En esos ocho años de gestión municipal, Solidaridad Nacional logró su mayor arraigo en los sectores populares de Lima a través de obras públicas orientadas al acceso a la salud y a la infraestructura urbana.
Respaldado por su alta popularidad en Lima Metropolitana, Luis Castañeda Lossio volvió a tentar la presidencia de la República en 2011 con la marca de Solidaridad Nacional, sin embargo, nuevamente el objetivo le fue esquivo. Finalizada la campaña electoral, la identidad de la organización experimentó ciertas variaciones para afianzar su identificación con los sectores populares. Bajo la secretaría general de José Luna Gálvez, Solidaridad Nacional proyectó una imagen de ser un colectivo conformado por "provincianos emergentes", representantes de historias de éxito sobre la base del esfuerzo individual; fortaleció la estructura de la organización teniendo como principales bases los sectores populares de Lima Sur y Lima Este; y desarrolló sus vínculos con instituciones paralelas, tales como el consorcio universitario Telesup y la Asociación por los Pobres del Perú7. De esta manera se consolidó el carácter popular de una organización que había surgido de sectores mesocráticos.
En las elecciones municipales de 2014, Castañeda Lossio fue elegido por tercera vez alcalde de Lima Metropolitana. Además, Solidaridad Nacional ganó en 17 de los 42 distritos de la capital. Sin embargo, a diferencia de las experiencias anteriores, la gestión en Lima Metropolitana no gozó de una alta aprobación entre la opinión pública8. Antes de iniciar su tercer mandato se revelaron testimonios que involucraban a Luis Castañeda Lossio en el caso de corrupción Lava Jato. La pérdida del arraigo popular del líder y los fracasos en las elecciones generales del año 2016 y en las elecciones congresales extraordinarias de 2020, evidenciaron la crisis de la organización.
4.2. La refundación en clave conservadora: Renovación Popular (2020-2024)
Bajo el liderazgo del empresario Rafael López Aliaga, la organización experimentó un nuevo cambio en su identidad, pero ahora en un sentido radical. Elegido regidor de Lima por Solidaridad Nacional en las elecciones de 2006 y militante de la organización desde 2009, Rafael López Aliaga se convirtió en secretario general de Solidaridad Nacional en septiembre de 2019, consumando el cambio de nombre, ideario y símbolo de la organización en octubre de 2020. Para un medio televisivo local, Rafael López Aliaga explicó con las siguientes palabras esta refundación:
El concepto solidario se eleva a un nivel mayor, el nivel mayor es Dios, es Cristo... Cristo deja una forma de actuar de convivencia fraternal, de la fraternidad cristiana se desprenden muchos temas, uno es el ser solidario, otro es la opción preferencias por la gente más necesitada... esta refundación es más profunda que el cambio de nombre, bueno el color va con la filosofía, el celeste es el celeste provida mundial. (2020, 0m20s1m53s)
Esta refundación implicó una modificación en la identificación de la organización con el "provinciano emergente", pasando esta apelación a ser subsumida dentro de la referencia a la "familia". De la experiencia anterior se mantendrá esa apelación preferencial a los sectores populares, pero ahora desde una retórica centrada en la defensa de la familia, la vida, los valores morales y la propiedad.
Podemos vincular la aparición de Renovación Popular en la política peruana con lo que Juan Fonseca (2022) ha denominado la hegemonización del conservadurismo evangélico en el Perú. Proceso gestado desde la década de 1980, esta hegemonización tiene como una de sus principales características su vocación reconstruccionista, teología que promueve el activismo político para "confesionalizar" las políticas públicas. El reconstruccionismo cristiano se presenta particularmente opositor a las políticas públicas vinculadas a la legalización del aborto y los derechos de la comunidad LGTB. Con Mis Hijos No Te Metas es un movimiento que ha sido promovido por líderes evangélicos reconstruccionistas, quienes no han dudado en presentar a este movimiento como una demostración de que el Perú es mayoritariamente cristiano, que esta mayoría comparte una visión conservadora de la vida y que el apoyo de esta mayoría es indispensable para el éxito de cualquier proyecto político (Flores, 2022)9.
Vale una precisión. Renovación Popular no es "el partido" del evangelismo reconstruccionista. Para avanzar en su agenda, estas Iglesias han diversificado su influencia y presencia en diferentes organizaciones. En una democracia sin partidos institucionalizados como la peruana, los grupos de interés ejercen mayor poder que las organizaciones que participan en los procesos electorales. En tal sentido, Renovación Popular puede ser comprendido como una suerte de "caja de resonancia" del conservadurismo evangélico. Pero también vale añadir que Renovación Popular imprime su propio carácter beligerante y radical a la propuesta reconstruccionista.
4.3. Las elecciones generales de 2021 y la narrativa del fraude
La primera competencia electoral en la que Renovación Popular participó fueron las elecciones generales de 2021. La campaña electoral reveló el estilo de hacer política del líder y la organización, caracterizado por la confrontación y la polarización no solo contra sus adversarios políticos, sino también contra los medios de comunicación, colectivos sociales y las instituciones públicas. Rafael López Aliaga, candidato presidencial de Renovación Popular, logró progresivamente escalar en las preferencias electorales, alcanzando el tercer lugar con un 11,7% de los votos válidos, por detrás de Keiko Fujimori que quedó en segundo lugar con 13,4% y Pedro Castillo que obtuvo el primer lugar con el 18,9%. Los distritos electorales en donde Rafael López Aliaga obtuvo sus mejores resultados fueron los votos de los peruanos en el exterior, Lima, Lambayeque, Callao, La Libertad, Huánuco, Ica y Tumbes. En todos estos distritos electorales el candidato de Renovación Popular quedó entre los tres primeros lugares, pero -salvo los votos en el extranjero que constituyen una circunscripción- en ninguno de ellos superó el 20% de los votos válidos (véase Cuadro 1).
A pesar de que ninguna organización civil nacional ni internacional puso en duda el correcto desarrollo del proceso electoral, los resultados no fueron aceptados por Renovación Popular. Al mismo estilo de Donald Trump en Estado Unidos y Jair Bolsonaro en Brasil, Rafael López Aliaga (2021) denunció que se había consumado un fraude electoral con el objetivo de evitar que su candidatura alcance la segunda vuelta:
En primera vuelta nos robaron más de un millón de votos a nivel nacional. Lo dije en su momento, tengo muchísimas dudas del trabajo de la ONPE, pues con ese millón de votos que no nos contabilizaron hubiéramos estado en segunda vuelta de lejos.
Este fue el primer ensayo en el cual Renovación Popular buscó instalar entre la opinión pública la narrativa del fraude, poniendo en cuestión la independencia del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) y de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE). Sin embargo, los reclamos de Renovación Popular fueron desestimados por los organismos competentes y el proceso electoral siguió su curso.
En las elecciones congresales, Renovación Popular ganó trece curules. Estos escaños estuvieron distribuidos de la siguiente manera: seis congresistas por Lima Metropolitana, uno por Arequipa, uno por el Callao, uno por La Libertad, uno por Lambayeque, uno por Lima Provincias, uno por Piura y uno por los peruanos y peruanas residentes en el extranjero (véase Cuadro 2). Los mejores resultados obtenidos por Renovación Popular se concentraron en la costa norte y en Lima y Callao, siendo el vicealmirante en situación de retiro (r) Jorge Montoya uno de los candidatos más votados en todo el proceso electoral10. Si consideramos la afiliación a la organización política, encontramos que de los trece congresistas elegidos ocho eran militantes de Renovación Popular durante el proceso electoral (Jorge Montoya, José Cueto, Alejandro Muñante, Esdras Medina, Noelia Herrera, Diego Bazán, Javier Padilla y Miguel Ciccia) y cinco no lo eran (Milagros Jáuregui, Norma Yarrow, Héctor Valer, María Córdova y Jorge Zevallos)11.
Cuadro 1 Mejores resultados electorales alcanzados por Rafael López Aliaga en las elecciones presidenciales de 2021 por departamentos (%)
Distrito electoral | Votos válidos (%) | Puesto |
---|---|---|
Extranjero | 21,4 | 1.er puesto |
Lima | 16,3 | 2.do puesto |
Lambayeque | 15,2 | 2.do puesto |
Callao | 14,8 | 3.er puesto |
La Libertad | 12,2 | 3.er puesto |
Huánuco | 11,4 | 2.do puesto |
Ica | 11,3 | 3.er puesto |
Tumbes | 8,9 | 3.er puesto |
Fuente: elaboración propia basada en ONPE (2021).
Los perfiles de los congresistas de Renovación Popular nos dan indicios de su representación. Jorge Montoya y José Cueto han sido altos oficiales de la Marina de Guerra del Perú, sus años de servicio incluyen el período de violencia política (1980-2000), ambos llegaron a ser vicealmirantes y jefes del comando conjunto de las Fuerzas Armadas. Por su parte, Milagros Jáuregui, Alejandro Muñante, Javier Rommel y Esdras Medina están vinculados a iglesias y organizaciones evangélicas. Milagros Jáuregui es pastora de la iglesia Misión Cristiana de la Casa del Padre, Alejandro Muñante es fundador de la Red Nacional de Abogados por la Defensa de la Familia, Javier Rommel es integrante de la Asociación Cristiana de Cooperación Humanitaria Buenas Nuevas y Esdras Medina es pastor de la iglesia Las Asambleas de Dios del Perú. Estas iglesias y organizaciones evangélicas han formado parte del movimiento Con Mis Hijos No Te Metas12.
Tras el triunfo de Pedro Castillo en la segunda vuelta electoral, Renovación Popular se sumó a las denuncias de fraude que hizo Keiko Fujimori. Este fue el segundo momento de la narrativa del fraude que alcanzó una mayor resonancia entre la opinión pública con el apoyo de cierto sector de los medios de comunicación. Si bien fue Fuerza Popular quien lideró esta "cruzada por la democracia", Renovación Popular contribuyó activamente en su difusión. Según una encuesta de opinión aplicada a escala nacional por el
Cuadro 2 Congresistas elegidos por el partido Renovación Popular según distrito electoral en las Elecciones Generales 2021
N.° | Nombre del(la) congresista | Distrito electoral por el cual fue elegido(a) |
1 | Jorge Carlos Montoya Manrique | Lima Metropolitana |
2 | José Ernesto Cueto Aservi | Lima Metropolitana |
3 | María de los Milagros Jáuregui Martínez | Lima Metropolitana |
4 | Alejandro Muñante Barrios | Lima Metropolitana |
5 | Norma Martina Yarrow Lumbreras | Lima Metropolitana |
6 | Héctor Valer Pinto | Lima Metropolitana |
7 | Esdras Ricardo Medina Minaya | Arequipa |
8 | Noelia Rossvith Herrera Medina | Callao |
9 | Diego Alonso Fernando Bazán Calderón | La Libertad |
10 | María Jessica Córdova Lobatón | Lambayeque |
11 | Javier Rommel Padilla | Lima Provincias |
12 | Miguel Ángel Ciccia Vásquez | Piura |
13 | Jorge Arturo Zevallos Aponte | Residentes en el Exterior |
Fuente: elaboración propia basada en ONPE (2021).
Instituto de Estudios Peruanos (IEP) en junio de 2021, el 31% de encuestados respondió que los reclamos de fraude sí tenían razón. La narrativa del fraude había logrado que ciertos sectores de la sociedad no creyeran en la imparcialidad de los organismos electorales.
El tercer momento de la narrativa del fraude se desarrolló ya en el parlamento, a través de la conformación de una comisión investigadora que fue presidida por el vicealmirante (r) Jorge Montoya. El informe en mayoría de esta comisión concluyó que existían indicios de infracción constitucional y delitos penales cometidos por funcionarios del JNE y de la ONPE. Estos hechos habrían configurado un "fraude a las leyes electorales" que permitieron, entre otras supuestas irregularidades, la inscripción de Pedro Castillo como candidato a la presidencia y de Dina Boluarte como candidata a la vicepresidencia. En otras palabras, según el informe en mayoría la presidencia de Pedro Castillo era el resultado de un proceso fraudulento13. Estos tres momentos de la narrativa del fraude evidenciaron -entre otros aspectos- que esta búsqueda de desacreditar al JNE y a la ONPE -dos instituciones fundamentales del régimen democrático- no respondía solo a la actitud de líder, sino a una estrategia de la organización en su conjunto.
5. El conservadurismo radical en el Congreso de la República
Pasaremos ahora a profundizar en tres ejes temáticos que consideramos relevantes del discurso político de Renovación Popular para comprender la impronta del conservadurismo radical en él. Para ello nos enfocaremos en la labor de integrantes de su bancada que han incidido en tres tópicos: el modelo económico, la memoria histórica en torno a los años de violencia política y la defensa de la familia y el concebido. Para comprender los significados que se entretejen entre estos tópicos nos parece importante considerar el marco en el cual la organización los encuadra, el cual es la denominada "batalla cultural". Veremos cómo dicha estrategia política define la enunciación política de Renovación Popular y, por consecuencia, los sentidos de los tres tópicos antes mencionados.
5.1. La batalla cultural: la polarización como lógica política
La batalla cultural es una lógica o estrategia política puesta en práctica por la derecha radical en distintos países y que en el Perú ha sido asumida por Renovación Popular. Consiste básicamente en disputar a los adversarios el sentido de valores, creencias, costumbres y memorias que cohesionan a una sociedad. De particular impronta gramsciana, la denominada "batalla cultural" busca reafirmar o modificar los significados dados por sectores mayoritarios de la sociedad a determinados acontecimientos, personajes, lugares, etc., para hegemonizar un proyecto político14. Veamos el siguiente ejemplo a propósito del Día Internacional de la Mujer:
[...] precisamente el 8 de marzo, en el "Día Internacional de la Mujer", reivindicamos su valor siendo pro-mujer [...]. Asimismo, no permitiremos que la ideología de género contravenga la meritocracia que ha de ser el criterio esencial para elegir a los servidores públicos de la administración de justicia y del Estado en general. En el Día de la Mujer ganamos otra batalla cultural reafirmando que la mujer nunca fue inferior, como para que nos quieran hacer creer que no puede lograr todo lo que ella quiera, por sí misma. (Muñante, 2023d)
Escrita por el congresista Alejandro Muñante, la cita nos remite a una disputa con la "ideología de género" por el significado del Día Internacional de la Mujer, vinculando el sentido de ser "pro-mujer" con la defensa de la meritocracia. Pero también es una cita que permite adentrarnos en un elemento esencial de la denominada "batalla cultural", su lógica de polarización, es decir, la manera en que plantea la relación entre prodestinatarios y contradestinatarios. Esta lógica la encontramos en cómo opera el nodo "ideología de género" dentro de la estructura discursiva de Renovación Popular, al ser significada por diferentes miembros de su bancada en columnas de opinión, proyectos de ley y debates parlamentarios como parte de una agenda "globalista" totalitaria y contraria a la soberanía nacional, que adoctrina y socaba a la familia poniendo en peligro a la juventud y a los niños del país15.
En la batalla contra la ideología de género y el globalismo, la moral reemplaza a la política. Esta se convierte entonces en un juego irreductible de suma cero que transforma al adversario en enemigo:
Porque, así como el amor echa fuera el temor, la verdad echa fuera la mentira, por eso tenemos que hablar verdad. Y cuando se habla verdad, hay conflicto. Conflicto con el engaño, con el error; y desde el Congreso y en las calles, seguiremos hablando verdad, porque no hemos venido a pactar o amistarnos con la mentira. (Muñante, 2022f)
La batalla cultural de Renovación Popular busca polarizar el campo político entre un prodestinatario que "abraza la verdad, ama a la patria y a la familia" frente a un contradestinatario que se basa en la mentira y son enemigos de la patria y la familia. En este imaginario político son las familias conservadoras a quienes representa Renovación Popular - hermanadas con sus Fuerzas Armadas claro está-, defendiéndolas de un enemigo con múltiples rostros: el feminismo, los comunistas, los caviares, los terroristas y el globalismo16. Esta polarización deviene, a su vez, en una suerte de exigencia permanente de "coherencia" por parte de quienes se identifican con la organización. Ello implica que, para mantener el lazo representativo construido sobre la base de la polarización, Renovación Popular debe presentarse permanentemente como una organización beligerante frente a aquello que sus seguidores reconozcan como "progresista", "comunista" o "caviar", de lo contrario correría el riesgo de perder seguidores17. La lógica política de la polarización atraviesa los diferentes tópicos que presentamos a continuación18.
5.2. La defensa del modelo económico
Uno de los nodos de la estructura del discurso político de Renovación Popular es la defensa del modelo económico neoliberal implementado en el país en la década de 1990. Desde la perspectiva de dicha organización, los últimos 30 años de la historia peruana han estado caracterizados por una suerte de "milagro económico" generado por las reformas estructurales de los años noventa. En esta lógica, las desigualdades socioeconómicas amplificadas por los efectos de la pandemia de la covid-19 se explicarían no por los límites del modelo económico, sino por lo que aún falta por hacer para profundizar su implementación. En tal sentido, más que cambiar el modelo económico, el Estado debe reforzar el modelo vigente.
En el marco de esta defensa del modelo económico se comprende, por ejemplo, la realización del foro "Modelo Económico Constitucional y el desarrollo del país", organizado por la bancada de Renovación Popular en enero de 2024. El coloquio tuvo como principales expositores a Jaime Yoshiyama, exministro del régimen autoritario de Alberto Fujimori y presidente del Congreso Constituyente Democrático que elaboró la actual Constitución Política del Perú; Diego Macera, Gerente General del Instituto Peruano de Economía, de orientación neoliberal; y Jaime de Althaus, periodista y autor de La revolución capitalista del Perú, libro que reivindica las reformas estructurales de los años noventa. Las palabras finales del foro estuvieron a cargo del congresista Jorge Montoya, quien sostuvo lo siguiente:
[...] nuestro contrato social que acaba de cumplir 30 años de vigencia con sorprendentes resultados que son motivo de admiración y sana envidia en el contexto internacional por los buenos resultados del modelo económico en el cual reconocemos es necesario avanzar para su profundización y eliminación de las brechas sociales que aún subsisten marcadamente. (2024, 2m3s-2m23s)
Las palabras del congresista conjugan dos componentes discursivos orientados a la interpelación de sus destinatarios: el descriptivo, que apela a la constatación de hechos (los resultados del modelo), y el programático, que refiere al hacer (la profundización del modelo). Desde esta enunciación política, la defensa del modelo económico supone la defensa de la Constitución de 1993. La bancada de Renovación Popular ha sido una férrea opositora a la propuesta de convocar a una Asamblea Constituyente que se encargue de redactar una nueva carta magna, tal como lo planteó el expresidente Pedro Castillo en la campaña electoral. En este aspecto, Renovación Popular coincide con otras organizaciones de la derecha peruana como, por ejemplo, el fujimorismo.
En el discurso político de Renovación Popular, la propiedad privada y el libre mercado -elementos centrales del modelo económico- son nodos discursivos ubicados en la jerarquía de prioridades junto a la defensa de la vida y los valores morales, todos ellos articulados en torno a un particular sentido de la "libertad". Como nos lo recuerda Strobl (2022), "tradición, familia y propiedad" es un tópico clásico del conservadurismo tradicional, que el conservadurismo radical reafirma. El siguiente extracto de una columna de opinión del congresista Alejandro Muñante (2023f) resulta ilustrativo:
No podemos dejar nuestro destino absoluto en manos de un Papá Estado que muchas veces asfixia nuestras libertades, vulnerando una serie de derechos, tales como: el derecho a vivir; a creer; a difundir nuestra fe y nuestras ideas; a educar a nuestros hijos conforme a nuestros valores; a la propiedad; al libre mercado.
Esta cita incluye una crítica al Estado redistributivo, una propiedad usual del neoliberalismo que lo acerca a postulados conservadores. Pero vale precisar que no estamos ante un programa económico "libertario", similar al proyecto de "La Libertad Avanza" liderado por Javier Milei en Argentina. Si bien, como lo ha destacado Vildoso (2022, p. 80), en el plan de gobierno de Renovación Popular se proponía un Estado que retrocedía en sus funciones de protección social; sus propuestas vinculadas a la apertura comercial, a la estabilidad macroeconómica y a la libertad económica resultaban ambiguas, no ortodoxas (Instituto Peruano de Economía, 2021).
Las propuestas en el campo económico de la bancada de Renovación Popular han estado centradas, además de la ya mencionada defensa de la Constitución de 1993, en el desarrollo agrario. En esta labor ha tenido protagonismo el congresista por Piura Miguel Ángel Ciccia, quien ha presentado proyectos de ley para promover la producción de fertilizantes -tema que adquirió centralidad en la agenda pública y gubernamental ante la crisis de importación de estos productos- y un proyecto orientado a lo que denomina el "desarrollo agrario inclusivo". Este proyecto toma como modelo de desarrollo agrario a la agroexportación, por lo que plantea que la pequeña agricultura o agricultura familiar debe articularse a ella para salir de la subsistencia:
Hay que llevar el "Milagro Peruano" a los más de 2 millones de productores agrarios de las más de 4 millones de hectáreas productivas. Si poco más de 200 mil hectáreas integradas a la agricultura moderna nos han llevado al puesto 11 del ranking mundial de exportadores de frutas y hortalizas, es impactante lo que se podrá lograr si integramos las más de 4 millones de hectáreas a la agricultura moderna (20 veces más potencial agrícola). (Ciccia, 2023)
Nótese cómo opera nuevamente el componente descriptivo en el discurso para legitimar al modelo: el "Milagro Peruano". Profundizar este milagro es el proyecto que sustenta la defensa del modelo económico que realiza Renovación Popular. El desafío ahora es explorar en cómo esta defensa se articula con otros dos elementos claves del discurso político de aquella organización: la redefinición de la memoria histórica y la denominada defensa de la familia.
5.3. Reescribir la historia para reivindicar a las fuerzas del orden
La batalla cultural de Renovación Popular implica la batalla por la memoria, especialmente aquella referida a las décadas de 1980-2000, años de violencia política en el Perú. La organización es particularmente crítica a las conclusiones del Informe final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación, presentado en 2003, que nos habla de "Conflicto Armado Interno" (concepto del derecho internacional humanitario) y de las responsabilidades de agentes de las fuerzas armadas y policiales en casos de violaciones de los derechos humanos. Al respecto resultan ilustrativas las siguientes intervenciones de integrantes de la bancada de Renovación Popular en el debate parlamentario sobre la propuesta de declarar el 22 de abril como "Día de la Lucha Contra el Terrorismo":
Señor presidente, recuerdo que cuando estuve colaborando en la Comisión investigadora, hace unos años atrás de los textos escolares en la Comisión de Educación, informe que fue aprobado por la Comisión de Educación... un informe que tenía sustento basto con respecto a la tergiversación de la historia de la época del terrorismo, y creo que es importante que esta fecha, también sirva para que los colegios, las instituciones públicas, todas ellas, puedan hacer realmente una reivindicación de lo que fue realmente la historia del terrorismo en nuestro país. (Alejandro Muñante en Congreso, 2022e)
Lamentablemente en la guerra, la parte ideológica que le correspondía a los partidos políticos no le hicieron, y por eso hay una narrativa equivocada de qué es el terrorismo y qué es lo que peleamos en esa época. Acá no hay que hablar mal de nadie, simplemente lo que se hizo, se hizo porque tuvo que hacerse. Los excesos fueron castigados, fueron penalizados, hasta actualmente existe una persecución judicial contra los miembros de las Fuerzas Armadas, para los que no lo saben. (Jorge Montoya en Congreso, 2022e)
La batalla cultural aquí consistente en erradicar toda "tergiversación" de la historia apelando al recurso ideológico de que existiría una suerte de "literalidad última" o "entendimiento aséptico" de lo que significaron los años de la violencia política. Para ello, el discurso asume un componente prescriptivo al apelar a una suerte de "necesidad deontológica" para reivindicar el papel tutelar de las Fuerzas Armadas, incapaces, por tanto, de ser responsables de cualquier daño a la nación.
Sin embargo, esta suerte de "revisionismo histórico" en clave del conservadurismo radical no solo interviene en el pasado, sino también en el presente, habilitando formas de estigmatización política. Esta estigmatización ha operado en distintas coyunturas, entre ellas la campaña electoral de las elecciones generales de 2021 al vincular las candidaturas de Pedro Castillo y Verónika Mendoza con el terrorismo. Otra coyuntura crítica en donde Renovación Popular apeló a esta estigmatización política fue en aquella ocasión signada por las protestas sociales que se generaron luego del frustrado golpe de Estado de Pedro Castillo. Sobre esta coyuntura, el congresista Alejandro Muñante (2023b) opinó lo siguiente:
Ahora mismo, en la actual coyuntura política, se ha evidenciado que ciertos azuzadores de estas marchas del caos tienen entre sus filas a gente vinculada a MOVADEF o que ha sido sentenciada por terrorismo. Por cierto, alejados de toda razón piden a la presidenta Dina Boluarte, una lista de peticiones que se hallan al margen de la ley como son: la restitución de Pedro Castillo (tema que es competencia del Poder Judicial), el cierre del Congreso (que tiene mecanismos constitucionales propios como la negación de la confianza en dos oportunidades), Asamblea Constituyente (no regulada en nuestra Constitución).
Resulta sugerente en esta cita la operación metonímica que su autor realiza entre: caos - Movadef - restitución de Pedro Castillo - cierre del Congreso - Asamblea Constituyente. En esta cadena de equivalencias el nodo "Movadef " condiciona el sentido de cada uno de los otros eslabones. De esta manera, la propia demanda de Asamblea Constituyente -que incluye el debate del modelo económico- queda inscrita en el campo del enemigo terrorista, del Movadef.
Esta reescritura de la historia habilita, además, otro frente de batalla: el Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Para Renovación Popular, este sistema ha beneficiado a los "enemigos de la democracia" al presuntamente favorecer a los grupos terroristas e ir en contra de los intereses del Estado. La causa de ello estaría en la "captura ideológica" del sistema:
El sistema interamericano de Derechos Humanos se encuentra en crisis y desgaste por sesgo ideológico. Su defensa de los derechos fundamentales se ha desvirtuado y como órgano supranacional, ha sido capturado ideológicamente por ideas marxistas, habiéndose politizado profundamente, lo que ha desvirtuado su esencia de jurisdicción. (Montoya, 2023c)
En sintonía con esta posición, el grupo parlamentario de Renovación Popular ha propuesto desvincular al Estado peruano de la Corte Interamericana de Derechos Humanos; en tal sentido sostienen que es imprescindible recuperar la soberanía jurisdiccional del Estado peruano que habría caído -siempre desde la lógica de este discurso- en una suerte de "colonialismo jurídico"19. En esta reescritura de la memoria histórica el Estado peruano -incluidas evidentemente sus fuerzas armadas y policiales- han sufrido los abusos de un organismo internacional ideologizado. De esa forma, para Renovación Popular las fuerzas enemigas no solo están en el frente interno: los "azuzadores", los "remanentes del terrorismo", sino también en el frente externo: los "detractores", el "colonialismo jurídico", las "ideas marxistas" impregnadas en los organismos internacionales. Este enemigo externo de diferentes rostros se condensa en el discurso político de Renovación Popular en el significante "globalismo", que articula las ideas marxistas con la denominada "ideología de género" en sus embates contra la familia.
5.4. La batalla decisiva: la defensa de la familia y del concebido
La escuela es otro campo de batalla para Renovación Popular. Quizás la escuela es uno de los espacios de disputa más importantes para el conservadurismo radical ya que, por un lado, conciben a este espacio como aquel que ha servido a los "caviares" para adoctrinar a los niños y niñas con su tergiversación de los años del terrorismo y -tal vez, sobre todo- con su "ideología de género"; por otro lado, sería también el espacio necesario para afianzar las tradiciones y los valores morales que defienden. Así se entienden, por ejemplo, los proyectos de ley presentados por la bancada de Renovación Popular que buscan involucrar a organizaciones de padres de familia (presumiblemente entre ellas organizaciones de padres vinculadas a Iglesias evangélicas reconstruccionistas) en la revisión de los contenidos de los textos escolares y erradicar el lenguaje inclusivo en la educación básica20. Estas iniciativas pueden ser entendidas como parte de la batalla cultural:
[...] este Congreso con leyes a favor de los padres contra el adoctrinamiento escolar; la autonomía universitaria, la protección a la madre gestante, la propuesta de cambio al nombre del Ministerio de la Mujer por "Ministerio de la Familia"; la importancia de la conmemoración del "Día de la Familia", "Día del Niño por Nacer", no es muy de su agrado, más bien aplauden las acciones de amparo que las contradicen. Defendamos nuestra soberanía. ¡No a la agenda caviar! (Muñante, 2022b)
Llegados a esta parte de nuestro análisis nos resulta ineludible ahondar en un elemento medular del discurso político de Renovación Popular: la familia. Para esta organización, la crisis social y política que afecta al Perú se explica en última instancia por la crisis que sufre la familia (heteronormativa, claro está). Entendida como la "célula básica de la sociedad", si la familia experimenta un proceso de desmoronamiento, el sistema social en su conjunto experimentará -por defecto- una dislocación. Al respecto, la siguiente cita resulta ilustrativa:
El principal generador de descomposición social en nuestro continente y nuestro país es el desmoronamiento y desinterés por la familia como célula básica de nuestra sociedad, unidad familiar en la que se desarrollan las primeras relaciones de los seres humanos. (Jáuregui, 2023a)
Desde esta perspectiva, las disidencias sexuales y las reivindicaciones de la comunidad LGTBI resultan ser una amenaza para la familia heteronormativa. Tal amenaza se entiende en gran medida por su carácter "antinatural", pues la familia heteronormativa no solo es entendida como una institución social, sino sobre todo es concebida como una institución natural. Lo biológico subsume a lo social en esta concepción de la familia, por lo que el orden social en última instancia se explicaría por un orden natural que tiene como fundamento a la familia heteronormativa y, por tanto, todo aquello que se aleja de este patrón resultaría "contranatural", origen del caos y del desorden social. Ahora bien, así como la familia heteronormativa es una institución natural, desde esta perspectiva el matrimonio -como acto fundante de una familia- también resultaría ser una institución natural. Por ello, para Renovación Popular demandas como el matrimonio igualitario no tienen cabida. De ahí que políticas públicas secularizadas sobre la educación sexual o el derecho al aborto tampoco tengan cabida para el conservadurismo radical de Renovación Popular, ya que resultan una amenaza para las instituciones del matrimonio y la familia.
La apuesta de Renovación Popular no solo es evitar que las demandas vinculadas a los derechos sexuales y reproductivos se conviertan en políticas públicas, sino erradicarlas del debate público, ya que por definición atentarían contra la integridad moral y natural de la sociedad. La cuestión del aborto es particularmente reveladora de la conjunción de componentes prescriptivos del discurso político de la organización con la apelación a principios que resultarían irrefutables, porque al entender que no existe justificación alguna para que la madre "mate a su hijo o hija", postula que el aborto por definición es irracional. Un fragmento de la exposición de motivos de la ley sobre los derechos al concebido, elaborada por la congresista Milagros Jáuregui (2021), nos ayuda a comprender este argumento:
Actualmente la vida de los niños por nacer se encuentra rodeada de una amenaza denominada "derecho a decidir", postulado feminista que se pretende encuadrar en el contexto de los derechos sexuales y reproductivos; sin embargo, no existe fundamento ontológico, sociológico ni jurídico justificante para que una madre opte por la muerte de su hijo.
Esta cita, además de poner nombre al contradestinatario -el feminismo-, plantea la siguiente cuestión: al presuntamente no existir fundamento alguno que justifique el debate en torno al "derecho a decidir" ¿qué puede justificar que una madre decida matar a su hijo?, la potencia emocional del argumento nos lleva al único fundamento que queda en pie para el razonamiento: la condena moral.
"La defensa de la familia y del concebido" son entonces parte de un mismo posicionamiento contrario a la secularización de las políticas públicas, articulando lo moral a lo natural, en donde "lo correcto" es aquello que responde al "orden natural de las cosas".
En consecuencia, el enfoque de género debe ser reemplazado por el "enfoque de familia" en las políticas de Estado21. La escuela, los ministerios, el parlamento, el Estado en su conjunto, son campos en donde el conservadurismo radical disputa la batalla cultural defendiendo a la familia frente a las amenazas de sus enemigos.
6. Conclusiones
Nuestro estudio ha buscado comprender la forma en que Renovación Popular ha construido su política de representación en el actual contexto de crisis política. Consideramos que los hallazgos nos brindan razones para afirmar que nuestra hipótesis se justifica: Renovación Popular busca construir su lazo representativo a través de un discurso orientado a polarizar el campo político, planteando una nueva versión del neoliberalismo que apela a la figura de la autoridad tutelar, la cual tiene como referencias a las fuerzas armadas y a las iglesias evangélicas reconstruccionistas.
Renovación Popular radicalizó al otrora partido fundado por Luis Castañeda Lossio a partir de una agenda ultraconservadora, sobre la base de una articulación con sectores evangélicos reconstruccionistas y con sectores de las Fuerzas Armadas críticos al Informe final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación. En tal sentido, Renovación Popular puede ser entendido como un esfuerzo por revitalizar lo que Guillermo Nugent (2010) ha denominado el orden tutelar, restringiendo -entre otros aspectos- los derechos civiles y políticos de la población, configurando de esta manera una versión iliberal del neoliberalismo. Más que en la rigurosidad conceptual de sus diagnósticos sobre las crisis política y social del país o la consistencia de sus propuestas, la capacidad de interpelación del discurso político de Renovación Popular se encontraría en su dimensión afectiva, en su capacidad de movilizar los deseos de ciertos sectores de la población por alcanzar un orden social garantizado por las jerarquías militares y eclesiásticas.
El orden tutelar que propugna el conservadurismo radical opera en la memoria colectiva y en la institucionalidad pública. Reivindica a las Fuerzas Armadas y Policía Nacional exculpándolas de cualquier "exceso" cometido durante los años de la violencia política; denominan "terroristas" a quienes impugnan el orden constitucional y cuestionan las instancias internacionales de defensa de los derechos humanos. Aunado a ello, el conservadurismo radical rechaza la secularización de las políticas públicas vinculadas a los derechos sexuales y reproductivos, apelando a un orden "natural" basado en la familia y al matrimonio heteronormativo.
Considerando que Renovación Popular es una organización que no escapa a la precariedad institucional de los partidos políticos en Perú, esta se encuentra habitada por diferentes vertientes, entre las que destacan representantes del empresariado, del reconstruccionismo evangélico y de sectores de las Fuerzas Armadas que cuestionan las conclusiones de la Comisión de la Verdad y Reconciliación. En el periodo legislativo aquí analizado, la articulación de dichas vertientes ha sido posible a través de nodos discursivos (la defensa del modelo económico, el terrorismo, la ideología de género, la defensa de la familia) que han polarizado el campo político identificando a un enemigo común.
Al momento de concluir la escritura de este trabajo, los medios de comunicación anunciaban la renuncia de tres miembros de la bancada parlamentaria a la militancia en Renovación Popular. Entre los renunciantes se encontraban representantes provenientes de las Fuerzas Armadas. Lograr la institucionalización de la organización que ha venido representando al conservadurismo radical en el Perú continuará siendo un desafío en el corto y mediano plazo.
Concluimos compartiendo las siguientes preguntas: ¿cómo el conservadurismo radical influirá en el mediano plazo en los procesos de democratización social en el Perú?, ¿cómo incidirá en la institucionalidad política del país en el mediano plazo?, ¿cómo influirá en la reconfiguración de la derecha peruana en su conjunto? Consideramos que son interrogantes que quedan abiertas y que pueden orientar futuras indagaciones.